Los Bislett Games en Oslo, la capital noruega, constituyen una de las citas de mayor tradición en el atletismo mundial. Se desarrollan en el Estadio Bislett y forman parte de la Diamond League, convocando anualmente a grandes figuras.
Esta vez, el espectáculo se cerró con una prueba nueva en el programa, los 300 metros con vallas. Y allí volvieron a encontrarse los notables especialistas que revolucionaron los 400 vallas en los últimos tiempos, copando todos los podios olímpicos y mundiales.
El triunfo fue para la estrella noruega Karsten Warholm con 32.67, que constituye el mejor registro mundial en la distancia de 300v (había marcado 33.03 el 26 de abril en Xiamen, China). Warholm es el poseedor del récord mundial de 400 vallas, que consiguió con su histórica performance del oro olímpico en Tokio 2021, cuando bajó los 46 segundos.
Ahora, sobre 300 metros, quedó segundo el estadounidense Rai Benjamin (campeón olímpico en París) con 33.22. Y el otro integrante del trío, el brasileño Alison Brendom Alves dos Santos, fue tercero con 33.38, seguido por Abderrahman Samba (Qatar) con 33.84 y el otro astro brasileño, Matheus Lima da Silva con 34.34. El registro de Alison constituye el mejor sudamericano, ya que Matheus tenía el anterior con 33.98 desde la citada carrera en Xiamen.
El festejo de Warholm en Oslo.
También hubo presencia sudamericana en otras dos pruebas: el lanzamiento de jabalina y los 400 metros vallas, en el sector femenino.
En jabalina, la colombiana y subcampeona mundial Flor Denis Ruiz estuvo alejada de su mejor nivel, ya que tiró 54.57 y ocupó el 8° puesto. Allí venció la campeona del mundo, la japonesa Haruka Kitaguchi con 64.63.
En los 400 vallas, la panameña y recordwoman sudamericana Gianna Woodruff tuvo una muy buena performance, al quedar tercera con 54.45, escoltando a la estadounidense Dalilah Muhammad (53.34) y la eslovaca Emma Zapletalova con 54.44.
Woodruff en 400 vallas
El salto con garrocha vio otra exhibición del sueco Armand Duplantis con sus 6.15, con amplia ventaja sobre el griego -y también medallista olímpico- Emanoul Karalis con 5.82.
En la llamada «Milla de los Sueños» se vio una carrera sensacional, con los once primeros debajo de 3:50 y la caída de cuatro récords nacionales de países europeos. Uno de dichos récord fue para el vencedor, el portugués Isaac Nader, con 3:48.25, quedando segundo el juvenil australiano Cameron Myers con 3:48.07 y tercero Stefan Nillesen, de Países Bajos con 3:49:02. El ex campeón mundial Timothy Cheruiyot, de Kenia, fue 4° con 3:49.06 y detrás cayeron los récords alemán (Robert Farku, 5°con 3:49.12), italiano (Federico Riva, 10° con 3:49.72) y el belga Ruben Verheyden (12° con 3:50.67).
También se había pronosticado un «ataque al récord del mundo» en los 5.000 metros, con la presencia de la legión etíope, pero se quedaron lejos del objetivo. El vencedor fue el estadounidense Nico Young con récord de su país de 12:45.28 (aunque Grant Fisher tiene 12:44.09 en indoor), delante de los etíopes Biniam Mehary (12:45.93) y Kuma Girma (12:46.41). El otro astro etíope Hagos Gerbrhiwet terminó 5° con 12:46.82, cuando el año pasado había ganado con 12:36.73, la segunda marca de la historia.
En los 800 llanos también estuvieron los mejores del mundo, con triunfo para el campeón olímpico Emmanuel Wanyonui (Kenia) en 1:42.78, seguido por el español Mohamed Attaoui con 1:42.90 y el argelino Djamel Sedjati con 1:43.06.
Otra campeona olímpica en la pista del Bislett fue la velocista Julien Alfred, de Santa Lucía, quien ganó con 10.89. Y recibió su premio de manos de Usain Bolt.
Usain Bolt y Julien Alfred
