Fuente: World Athletics
La australiana Nina Kennedy con 4.90 se proclamó como la nueva reina del salto con garrocha femenina, tras una extenuante competición extendida a lo largo de 3 horas y 22 minutos, con 19 protagonistas de esta final. Entre ellas, la venezolana Robeilys Peinado volvió a mostrar su calidad internacional -ya había estado en dos finales mundialistas- y ocupó el 10° puesto con 4.60 m., su mejor registro de la temporada.
La medalla de plata fue para la estadounidense Katie Moon -defensora del título logrado en Tokio 2021- al marcar 4.85, el mismo registro que la canadiense Alysha Newman, quien se llevó el bronce.
Moon y Newman tuvieron que recurrir al desempate para resolver el segundo puesto.
La competencia comenzó a decidirse sobre los 4.80 m. donde calificadas atletas quedaron al margen: la campeona olímpica 2016, Aikaterni Stefanidi (Grecia), la neocelandesa Eliza McCartney y la ex campeona europea Wilma Murto (Finlandia) entre ellas. En cambio siguieron adelante Kennedy, Moon, Newman y la actual campeona europea, la suiza Angelika Moser.
Kennedy tomó la delantera en solitario por primera vez con su primer salto de 4,85 m después de que Newman, Moon y Moser fallaran. En segundo intento Newman y Moon superaron esa altura, en tanto Moser -tras fallar dos- reservó el último para los 4.90, que no pudo concretar
En el Mundial de Budapest 2023, Kennedy y Moon acordaron compartir el título. Pero esta vez, Kennedy ya había anunciado que competiría hasta el final si llegaban igualadas.
No sucedió ya que la australiana pudo pasar los 4.90’ m. que le dieron el triunfo. La australiana llegó a París llena de confianza después de vencer a todas las demás contendientes en las reuniones de la Diamond League de Mónaco y Londres previas a los Juegos, y cumplió con su deber en el escenario más importante de su vida. Dijo que ganar en Budapest el año pasado la había puesto en el camino hacia esta victoria.“Compartir con Katie pasará a la historia como una de mis competencias favoritas, pero realmente despertó en mí la confianza en mí misma de que ‘joder, chica, eres lo suficientemente buena para ganar una medalla de oro’, y tal vez no pensaba eso antes de Budapest, pero ahora definitivamente lo pienso”, explicó.
“Desde los Campeonatos del Mundo de Budapest, he pensado sinceramente en ganar los Juegos Olímpicos todos los días. La noche en que terminé en Budapest, empaté el oro, increíble, pero mi primer pensamiento fue: “Bueno, ahora tengo que ganar los Juegos Olímpicos”.
Ante el desafío de una competición final prolongada en París, se dijo a sí misma: “la ganadora de esta competición será la persona que pueda mantener la concentración durante más tiempo… Realmente estaba tratando de calmarme allí”.
La confianza en sí misma de Kennedy está ahora a tal nivel que también cree que puede desafiar el récord mundial de 5,06 m en los próximos años, y dijo que esa era su nueva ambición.
Moon describió la competencia como una “batalla”.“Fue muy divertido”, dijo. “Siento que podríamos haber seguido adelante si no hubiéramos tenido el descanso habitual, pero estoy muy feliz de irme con una medalla hoy. Este año ha sido realmente difícil. Sentí que si mi cuerpo podía aguantar, eso era lo que yo podría hacer, o incluso más. Estoy muy feliz de que todo saliera bien el último día”.